La
Carrera solidaria de Ziordia no es una carrera cualquiera, ni siquiera es una
carrera más de las muchas que se disputan a lo largo del mes de mayo en
Navarra, fuera de Navarra, en todo el mundo.
No
es tampoco únicamente una carrera solidaria.
Es
un compendio de muchas cosas, de muchos valores, de mucha gente implicada y
sobre todo, de mucha ilusión y esfuerzo.
Ilusión
y esfuerzo que salen en primer lugar de José Ramón Ramírez, vecino del pueblo y
organizador de la Carrera.
Durante
los meses previos brinda su esfuerzo y todo el tiempo que tiene a preparar la
carrera, a conseguir patrocinadores. En definitiva, a hacer de éste, un evento
único, especial, inolvidable.
Ayer
tuvo lugar la IV edición de la Carrera. Nosotros ya habíamos asistido el año
anterior y la experiencia había sido extraordinaria, así que volvimos a
apuntarnos.
Alberto
como corredor.
Mi
hija y yo como voluntarias.
Y
como nosotros, muchísima más gente, corredores, colaboradores, amigos todos al
fin y al cabo con ganas de contribuir, de poner un granito de arena que, aunque
parezca insignificante acaba convirtiéndose en una gran montaña que ayuda a
muchas personas. En este caso las alimenta, ya que la inscripción consiste en
3kg de comida que son cedidos al Comedor social París 365.
Había
que llegar con tiempo. Había que saber en qué lugar nos colocábamos. Había que
sentir el cariño de la gente, respirar el buen ambiente que reinaba allí. Había
que grabarlo todo en la retina para luego poder describirlo con todo detalle. Y
sobre todo, había que pasarlo bien.
Y
lo hicimos.
Todos
los allí reunidos.
Formando
parte de un todo.
Siendo
el todo de una parte.
El
tiempo también acompañó en esta ocasión y el sol iluminó cada rincón de ese
precioso pueblo y lo hizo más bello todavía.
Y
allí estaba esperándonos José Ramón, cuya presencia parecía que se
multiplicaba. Estaba pendiente de todo y de todos. Para que no hubiera fallos.
Para que nadie dejara de disfrutar.
Foto: Arantxa Murugarren |
Nos
indicó dónde debíamos ponernos durante la carrera.
Indescriptible
la sensación cuando vimos el lugar.
Un
cruce a la orilla del río, junto a un pequeño puente por el que pasarían los
corredores. Yo debía procurar que el paso quedase vacío.
Mi
hija tenía que captar esas imágenes que luego quedarán en el recuerdo. Esas que acompañarán las crónicas, las reseñas en las redes sociales. Las que se verán y dejarán constancia de todo.
Y ahí estuve, animando a cada corredor, mientras el rumor del río acompañaba con
su banda sonora, murmullo sereno acompañado de las risas de los niños que
jugaban en el parque.
Los
corredores sonrientes, agradeciendo los ánimos, sabiendo que su cansancio tiene
recompensa, la de saber que esa ayuda final también llevaba su nombre. Veía sus
caras, mis ojos brillaban, mi voz salía con fuerza a pesar de la emoción.
Vino
gente de muchas partes de la geografía española. Todos con ilusión, con su
aporte, con sus ganas de apoyar.
Los
chicos del reto Dravet con sus camisetas moradas, recogiendo bolígrafos usados.
Representantes de la Fundación Dravet que recoge fondos para la investigación del
Síndrome Dravet, enfermedad infantil para
la que aún no hay cura.
Al
término, nos esperaba una deliciosa merienda preparada en la Sociedad del
pueblo. Merienda de la que dimos cuenta rápidamente: txistorra, tortilla de
patatas, panceta… Buena comida, inmejorable compañía. Entonces, se repartieron los premios del sorteo que se había realizado entre los participantes.
Calor
humano y sin distancias.
Desconocidos
y conocidos al mismo tiempo. Amigos y compañeros.
Unidos
por una causa.
Por
una persona que nos había contagiado con su energía y al que habíamos seguido
sin dudar.
En
un marco incomparable.
Una tarde inolvidable, miles de imágenes, una razón:
S O L I D A R I D A D.
Y
el deseo de volver a estar ahí el año que viene.
Y
ayer a las 12 de la noche, comenzaba la cuenta atrás.
Un
año por delante. Unos recuerdos para no olvidar.
Hola Arantxa. Me presento, soy Luis Prieto, miembro del Equipo de Desempeño Social de Magotteaux Navarra, empresa ubicada en Urdiain y que fue colaboradora del evento. Me gustaria ponerme en contacto contigo para una peticion. Mi correo es: luis.prieto@magotteaux.com
ResponderEliminarHola Luis. Te envié un e-mail para que pudieras contactar conmigo pero no estoy segura de que lo hayas recibido. Un saludo
EliminarMe encanta, Arancha. ¡Qué jornada tan especial se respira! Sí que parece especial la carrera de Ziordia. Me alegro por todo lo que disfrutasteis, por la solidaridad que conlleva y porque ya estáis haciendo la cuenta atrás para el próximo año. Que entonces todo salga tan bien como esta vez
ResponderEliminarLa verdad es que fue una carrera muy especial. Y un placer poder colaborar aunque fuera solo un poquito.
EliminarYa falta menos para esta edición!!!
ResponderEliminarJosé Ramón