martes, 1 de diciembre de 2020

RESEÑA DE: TIERRA - ELOY MORENO

 



TÍTULO: TIERRA

AUTOR: ELOY MORENO

GÉNERO: NARRATIVA / FICCIÓN CONTEMPORÁNEA



El problema de buscar la verdad es encontrarla y no saber que hacer con ella. 





OPINIÓN PERSONAL:


No recuerdo el confinamiento de marzo como un buen periodo, tampoco en lo que a lectura se refiere. Al menos para mí. Intenté paliar el tedio de las largas horas del día con los libros, pero no lograba concentrarme. Cogía un libro y después de leer unas cuantas páginas lo dejaba. Esto se repitió una y otra vez, hasta que cayó en mis manos Tierra. 

Y fue por casualidad, o a lo mejor no fue algo tan casual, tal vez tuvo que ver ese destino que dicen que está escrito. Lo cierto es que los dos nos encontramos y como suele pasar con las cosas inesperadas, precisamente por eso, porque son inesperadas, fue una de las experiencias más gratificantes en esos momentos en que parecía ralentizarse el tiempo a pesar de seguir contando las horas. 

En mi opinión, un libro es bueno cuando, tiempo después de su lectura, las sensaciones y sentimientos siguen en la mente del lector, cuando este continúa acordándose de muchos o de alguno de sus pasajes, de los lugares, de los personajes, de la emoción o sufrimiento que le acompañaron entonces, de aquello que acompañaron a los personajes también. 

Quizás por eso he tardado tanto en escribir acerca de él, porque en parte, siento que esas emociones dejarán de pertenecerme, de arañarme por dentro en cuanto las plasme en el papel y se liberen de mi mente. Por otro lado soy consciente, de que no va a suceder así del todo, porque lo sentido no se olvida. 

Por otro lado, las cosas buenas hay que compartirlas. 

Me gustan las historias que no dejan indiferente, que hacen sentir, sufrir, reír, soñar y reflexionar. Todas esas historias que producen un torrente de sensaciones durante, y una vez terminada la lectura. Y, sobre todo, adoro esos libros que logran que me mantenga hasta altas horas de la madrugada, esos que evitan al sueño y hacen que esté totalmente inmersa en las letras, sabiendo que si me despisto un instante y cierro los ojos, me voy a perder algo importante. 

Y todo eso me sucedió y me sucede con Tierra. Me bastó un día y medio para saber que ya nada sería igual, del mismo modo que sabía que nada iba a ser como antes después del confinamiento. Y solo después de leído, fui consciente de que había devorado en unas horas un libro de más de 500 páginas. 

Por lo general, suelo evitar los libros demasiado largos, me cuesta leerlos. Algunos incluso, me llevan al hastío y hacen que deje de leer durante un largo tiempo. Aunque procuro terminarlos todos, la sensación última de insatisfacción que algunos me producen, hace que decida evitarlos. 

Tierra fue el libro elegido para la lectura conjunta de un grupo de internet. Me gustó la elección, porque me gusta la forma de escribir de su autor. Por eso no me costó decidirme por esta lectura, y lo hice sin mirar la extensión del libro, que leí en digital. 

Tuve la oportunidad de conocer a Eloy Moreno hace años, cuando vino a Pamplona a presentar El regalo, su por entonces último libro. Recuerdo que era junio. El mes está nítido en mi mente, no así el año. Creo que fue en 2016. Busqué la fecha exacta en la dedicatoria, pero al contrario que la mayoría de los escritores, este autor no pone la fecha en las novelas que firma. 

Eloy Moreno es un autor diferente, llega a las personas a través de su carácter amable, de su sencillez y cercanía a la hora de escribir y de hablar. 

En aquella ocasión no habló del contenido de “El regalo”, no dijo de qué trataba explícitamente. 

Contó anécdotas relacionadas con el libro y que en el fondo estaban estrechamente unidas a la lectura, a ese trasfondo que se percibe entre las letras. Hizo hincapié 

en que todos debemos seguir nuestros sueños y nos invitó a hacerlo. 

Escuché con atención todo lo que dijo e hice mías cada una de aquellas palabras. Estaba siendo un año malo, tanto a nivel profesional como personal. Había comenzado a escribir, a retomar la pasión por la escritura de mi juventud y que por avatares de la vida había dejado aparcada. Recuerdo que pensé que aquel era el momento ideal para dar un paso adelante e ir más allá, que era el instante perfecto para centrarme en ello y perseguir aquel sueño de ser escritora que una vez tuve. 

Con el tiempo lo olvidé, me olvidé de Eloy y de sus ánimos para perseguir lo que se desea. 

No leí “El regalo” hasta pasado un tiempo y cuando lo hice volví a rememorar todo lo escuchado en aquella presentación y, al leer la dedicatoria de nuevo volví a recordar aquellas palabras. 

He pensado muchas veces en aquella presentación. 

Mientras iba leyendo Tierra, iba reconociendo la escritura, el estilo de Eloy, directo, con lenguaje sencillo, con personajes tan similares a nosotros, tan real dentro de la ficción, tan ficticio que se convierte en tan real. 

Y la vida, la vida que a veces parece que nos lee el pensamiento y adelanta los acontecimientos o los acompasa a nuestro ritmo. 

Es un libro de lectura ágil y dinámica, con capítulos muy cortos y con final de capítulo intrigante. De esa forma mantiene la curiosidad del lector y le invita a no dejar de leer, a seguir pasando las páginas. 

Algo que quisiera resaltar de este escritor y que a mi me gusta mucho, es que en sus libros no hay sinopsis. Hay que leerlo para descubrir el secreto que encierra la historia, que se refugia en los lugares que plasma en cada novela, en cada situación tan bien descrita. 

Quizá sea premonitorio o solo una casualidad como he escuchado decir al autor en más de una ocasión a lo largo de este confinamiento, pero la realidad/ficción del libro se parece mucho a la que nos ha tocado vivir estos últimos meses, aunque dentro de un marco diferente. 

Aunque en mi opinión, Nellyne es el eje central de la novela ya que considero que gira todo alrededor de ella, de su historia, de su secreto mejor guardado, el resto de personajes también son importantes, todos ellos son relevantes.

Todos y cada uno tiene su misión, su papel en esa vida ficticia tan similar a la real.

Habla de miedos, de familia, de codicia, de envidias, pero sobre todo es una historia de vida. 

Se revelan muchas emociones en las páginas y deja muchas sensaciones, invita a la reflexión después de pasar la última página. Aborda temas actuales e incluso consigue que el lector haga una mirada introspectiva, algo que también me pasó con “El regalo”. 

De aquel libro, extraje muchas frases y párrafos que incluí en el devenir de mi día a día. 

Dos años después de aquella presentación que me marcó, presenté mi primer poemario y al firmar el primer ejemplar con un boli de gel rosa, me acordé de Eloy Moreno y su Bolígrafo de gel verde. Y sonreí. 

Seguramente nadie reparó en esa sonrisa, entre otras cosas porque aquel día no paré de sonreír, pero aquella fue especial. No conté entonces que parte de la inspiración , parte de la perseverancia y la ilusión que albergaban mi libro de poemas, se debían a lo escuchado aquella tarde de junio. 

Terminé de leer “Tierra” a las 4 de la madrugada de una noche desmadejada de confinamientos, pero en esa ocasión mi insomnio no era por el desasosiego que me producía esa situación. 

Esta vez tenía un motivo, terminar la lectura. 

Tenía sentimientos encontrados, quería terminar y no hacerlo para no dejar de estar ahí. 

Tan cerca y tan lejos de mi vida real. 

Sin embargo, seguí, seguí por no habría podido dormir si lo hubiera dejado. 

Y una vez terminado, me mantuve despierta hasta casi el amanecer porque no era capaz de dejar de pensar lo que había leído. 

Todo lo que había aprendido. 

Y en el refugio de mi cama con la melodía de mis propios pensamientos, me fui quedando dormida. 

Aquella tarde de junio, cuando me acerqué al autor para que me firmara el libro y después de leer la dedicatoria, le dije. 

“Si persigo mi isla, algún día yo estaré ahí, como estás tú ahora, firmando mi libro” 

Pero eso tampoco se lo conté a nadie. 

Hasta ahora. 



“Creo que fue allí, en aquel funeral al que le sobró tanto dinero como cariño le faltó, cuando nos dimos cuenta de que a la vez que nos abrazábamos nos despedíamos. 

[…] 

Con la muerte de mamá nuestros caminos se fueron, lentamente, separando. Cada vez las llamadas tardaban más, los mensajes eran más cortos y los silencios más largos. Hasta que llegó un día en el que ya no hubo contacto, simplemente dejamos de hablar. No ocurrió nada especial, y quizás eso, la ausencia de motivos, fue lo más triste de todo.” 

Tierra / Eloy Moreno




7 comentarios:

  1. ¡Hola!
    Sin duda soy de las tuyas. Vamos, de esas que necesita que un libro me haga poner el coco en marcha incluso después de terminarlo. Pero por contra, yo sí soy de libros largos, siempre y cuando no haya mucha paja en ellos.
    Por lo que nos cuentas sobre Tierra, se nota que lo has disfrutado muchísimo, y creo en parte, que el hecho de haber podido conocer al autor antaño, es un plus más del disfrute. No sé, soy de las que cree que si se conoce al autor se puede entender más el libro, vamos conectar más. Quizás sean paranoias mías.
    Y sí, espero que algún día puedas, porque no a mí, firmarme algún libro ;)
    Besotes

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  2. Hola guapa! No conocía este libro, tierra, pero leyendo tu reseña veo que es un libro intenso y que incluso después de leerlo estuviste pensando sobre el, eso me gusta, me lo voy apuntar porque veo que lo has disfrutado, pero será para más adelante porque al ser una libro de más de 500 páginas necesito tiempo para leerlo tranquilamente. Gracias por tu reseña. Un beso

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  3. Curioso que no incluya sinopsis en sus obras, así o quieres aventurarte a descubrir al autor o pasas de largo, lo veo un arma de doble filo. Se ve que es una historia que engancha, intensa, espero que no gire en torno a la muerte como dan a entender los fragmentos,bss!

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  4. Hola!
    Me siento un poco identificada: me costó concentrarme para leer a pesar de tener más tiempo libre.
    Me ha llamado la atención que el libro no tenga sinopsis, es todo un desafío lanzarse a leerlo pero, tras tú reseña, creo que me iba a gustar.
    Besos!

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  5. Suena una historia interesante por todas esas sensaciones que te ha hecho sentir su lectura. Me apunto tu recomendación.

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  6. Hola guapa, pues parece yo que durante el confinamiento lei todo lo que pude y eso que no estuve confinada por trabajar en un hospi... chulo el libro que nos comentas, me ha picado la curiosidad! besos

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  7. Hola Arantxa. Entreteniendo mi vida buscando algo bonito por Internet, he visto tu blog y he leído la bonita opinión que haces sobre el libro de Eloy Moreno. A mí también es un escritor que me gusta porque cada frase que escribe, deja un poso para analizar. No he leído "Tierra" pero la voy a leer, sobre todo, después de haber leído tu análisis tan hermoso y profundo. Yo también tengo su primer libro firmado. Recuerdo que fui expresamente a la Feria del Libro para que me lo firmara. Me encantó su sencillez. Te recuerdo con mucho cariño Arantxa y me alegra que sigas escribiendo. A ver cuando sale esa primera novela tuya que no me la pienso perder. Un abrazo muy fuerte.

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